La importancia del uso de la seda dental. Clínica Dental en Oviedo.
Por experiencia sabemos que al realizar diariamente nuestros hábitos de higiene bucal, es difícil acceder a ciertas zonas de la boca. Después de cada comida, bajo nuestras encías se acumulan restos de comida y placa sin darnos cuenta a los que es muy difícil llegar con un cepillado normal.
El uso de la seda dental es el mejor aliado para conseguir llegar a todas estas zonas de difícil acceso en las que el cepillo de dientes no tiene posibilidad. Además, nos ayudará a reducir el mal aliento mejorando nuestra higiene bucodental.
La importancia del uso de la seda dental
Como comentábamos en párrafos anteriores, una correcta higiene bucal ayuda a evitar la proliferación de placa bacteriana en nuestras piezas dentales. Con el uso de la seda dental ayudaremos a prevenir patologías como enfermedades periodontales y caries disfrutando de unos dientes y encías más sanos.
¿Cómo se forma la placa bacteriana?
La placa bacteriana aparece cuando las colonias de bacterias proliferan después de alimentarse de los restos de comida que quedan en nuestra boca. Los ácidos que segregan dichas bacterias, atacan el esmalte de los dientes provocando la aparición de caries.
Además, si no realizamos un correcto cepillado, no conseguiremos eliminar la placa, llegando a convertirse en sarro. Si éste se acumula durante mucho tiempo en nuestras encías, podrá causar patologías más graves a largo plazo. Un ejemplo es la gingivitis o periodontitis.
¿Cuándo utilizar la seda dental?
En nuestra clínica dental en Oviedo siempre recomendamos hacer uso de la seda dental por lo menos dos veces al día. Realmente no existe un horario óptimo para usar la seda dental, pero puesto que su uso requiere algo más de tiempo que un cepillado tradicional, aconsejamos buscar los momentos del día en el que dispongamos de tiempo suficiente. Así realizaremos una limpieza dental efectiva y cuidadosa controlando los depósitos de placa que quedan en nuestra dentadura.
Como dentistas en Oviedo siempre recomendamos el uso de la seda dental como parte de la higiene bucal diaria. Además, en los casos en los que se lleven puentes dentales o ortodoncia, es aún más necesaria.
¿Cómo se usa la seda dental?
El uso de la seda dental requiere cierta destreza, pero una vez se tenga la técnica adecuada, su uso será igual de simple que el cepillado de dientes.
- Cortar un trozo de seda: Lo mejor es que tenga 50 cm de extensión. Una vez cortado, enroscar los extremos entre los dedos dejando 7 cm aproximadamente entre ellos. El resto de dedos ayudarán a manejar la seda entre los dientes. Un consejo es enrocar la mayoría de la seda en una única mano para disponer siempre de seda limpia.
- Movimiento en zig-zag: Este es el mejor movimiento. Hacia ambos lados del diente. Si al realizarlo tus encías sangran, te recomendamos acudir sin falta a tu odontólogo de confianza para realizar una revisión. Podría ser un síntoma de enfermedad periodontal.
- Encías: Cuando lleguemos a la encía, la limpiaremos con suavidad rodeando la base del diente.
- Enjuague dental: Después de la limpieza con la seda dental, aconsejamos utilizar un enjuague o colutorio bucal. De esta forma eliminaremos la placa desprendida durante la limpieza. Algo muy importante aquí es utilizar colutorios que no contengan alcohol para evitar irritar las encías.
Tipos de seda dental
Si estás pensando en comenzar a utilizar la seda dental, debes conocer que actualmente en el mercado existen distintos tipos. Cada uno de ellos tiene particularidades diferentes según su propósito o material con el que se ha fabricado.
- Seda dental: Indicada para espacios interdentales normales. Podemos encontrarla con cera o sin cera, siendo esta última la más habitual. Su forma es plana y de gran superficie.
- Hilo dental: Se deshilacha más fácilmente que la seda dental. Posee prácticamente las mismas características pero su forma es redondeada.
- Super Floss: Su uso está indicado específicamente para aparatos de ortodoncia o puentes fijos. Facilita en gran medida la limpieza en las zonas de difícil acceso.
Pese a que estas sedas tienen un uso concreto para cada situación, es posible y recomendable utilizar cualquiera de ellas para la limpieza dental. Su uso ayudará a eliminar los restos de comida y placa de manera efectiva.
Lo que sí debemos tener muy en cuenta es la presión que aplicamos al utilizar la seda. Si aplicamos demasiada fuerza irritaremos las encías, y si lo hacemos de manera floja no limpiaremos al 100% los restos de comida.
El primer día que utilices la seda dental puede conllevarte cierta incomodidad, pero con el paso de los días, será un acto cotidiano que podrás realizar con los ojos cerrados.
Solicita más información
No dudes en ponerte en contacto con nuestra clínica dental en Oviedo si necesitas más información acerca de la salud bucodental. Estaremos encantados de ayudarte.