¿Qué hacer ante la caída prematura de un diente en un niño?
Cuando un niño pierde un diente es habitual apreciar que las piezas dentales adyacentes se inclinen o se muevan. Es normal. Los dientes de al lado tienden a cerrar el hueco dejado por la pieza perdida. Esto provoca una disminución del perímetro de la arcada dental. Se originan así malposiciones dentarias, apiñamientos y problemas en la masticación. Y este caso puede darse tanto en las piezas definitivas como en las de leche.
En nuestra clínica dental de Oviedo, hemos observado que muchas personas piensan que la caída prematura de un diente de lecho no tiene importancia. Pero no siempre es así. Por ello, ante la pérdida de una pieza dental en un pequeño, aconsejamos siempre realizar una ortopantomografía. Así podremos ver el estadio de maduración del diente definitivo que le sucederá al diente caído y tomar una decisión.
Si el diente definitivo tiene desarrollados ya dos tercios de la raíz no es necesaria la colocación del mantenedor de espacio. La erupción del nuevo diente es inminente y la ausencia del provisional no dejará huellas en la salud bucodental del niño. Si no se apreciara desarrollado el diente definitivo, hemos de vigilar la situación y en ocasiones colocar el mantenedor. Por ello, no se puede dejar pasar esta situación. Ante la pérdida prematura de una pieza dental se ha de acudir con el niño al dentista. El odontopediatra realizará un valoración y aconsejará sobre el tratamiento más adecuado.
¿Es adecuado un implante dental para un niño?
Cuando un niño pierde una pieza dental definitiva es posible que se tenga que recurrir al tratamiento con implantes dentales, pero esto depende de muchos factores y la edad y su desarrollo son calves.
Los implantes dentales son elementos biocompatibles destinados a sustituir dientes tanto en el maxilar superior como en el inferior. Son soportes estables, resistentes y eficaces, que reemplazan la raíz del diente perdido, sobres los que se colocará una prótesis o corona a medida.
Para colocar un implante dental en nuestra clínica de Oviedo siempre se tenemos en cuenta la edad del paciente. Los implantes se osteontigran en el hueso y dado que en los niños el crecimiento es constante, como especialistas en implantes dentales en Oviedo, aconsejamos postergar su colocación hasta más o menos los 18 años. Momento en el que ha terminado el crecimiento óseo.
No obstante, el sexo de los niños puede influir. El crecimiento de las niñas se detiene antes por lo que los implantes dentales pueden realizarse sin esperar a la mayoría de edad.
Opciones ante la pérdida de un diente definitivo en un niño.
Si bien los implantes dentales, no parecen ser a priori la opción más adecuada, existen otras soluciones que ayudarán a los pequeños a recuperar gran parte de la funcionalidad de sus dientes y a devolverles la estética perdida.
- Prótesis parcial removible. Este tipo de tratamiento es una de las opciones rehabilitadoras más utilizadas. Está adecuada tanto para la dentición temporal como para la permanente. Las prótesis parciales removibles se puedes colocar a modo de mantenedor de espacio en la dentición temporal hasta que haga erupción la pieza permanente. También son una opción en la dentición definitiva hasta que el crecimiento del paciente cese y se pueda optar por la colocación de un implante dental definitivo.
- Mantenedor de espacio. Otra forma de reponer dientes ausentes tanto temporales como permanentes es la utilización de mantenedores de espacio. Este tipo de dispositivos se utilizan cuando la pieza a reponer es unitaria y del sector posterior. Cuando el mantenedor no va a quedar a la vista. Este elemento consta de 3 partes: dos anclajes que se cementan en los pilares adyacentes al espacio edéntulo y un diente artificial que irá ubicado en dicho espacio. Su ventaja es que es un elemento fijo que el niño no puede manipular.
- Reimplantación de diente perdido. En ocasiones, sobre todo cuando las piezas perdidas son los incisivos centrales superiores definitivos, aconsejamos recurrir a la reimplantación. Este tipo de tratamiento es posible cuando se realiza entre los 5 y 20 minutos de la pérdida. Y en los casos de dientes con ápices inmaduros (ápices abiertos).
Así que recordad, ante la pérdida dental prematura de un niño, acudid a vuestro dentista de confianza. Os aconsejará y encontrará la solución para tratar el problema. No lo dejéis pasar.