Clínica dental Oviedo
Se han descubierto variados motivos por los cuales se puede afirmar que el estado de la salud bucodental afecta directamente a nuestra salud general. El facultativo tiene un papel activo en el diagnóstico de otras enfermedades que no son propias de la boca. Dolencias que, incluso pueden ser asintomáticas, pero que bajo la experta mirada del dentista puede ser diagnosticada con una exploración clínica.
- Cáncer de colon
La bacteria Fusobacterium nucleatum puede vincularse con las células del colon y desencadenar una secuencia de cambios que pueden conducir al cáncer de colon. Sus niveles son mucho más altos entre las personas que presentan enfermedad de las encías.
- Enfermedades sistémicas
Destacar la importancia de la prevención primaria y secundaria, el diagnóstico y el tratamiento de las patologías periodontales, habida cuenta de que el riesgo de mortalidad es mayor en personas con periodontitis en comparación con la población sana.
La periodontitis es una infección oral crónica localizada en las encías que desencadena una respuesta inmuno-inflamatoria local, pero también sistémica, y se constituye como una fuente de bacteriemia, es decir, de difusión de bacterias al torrente sanguíneo. Existen crecientes evidencias científicas y clínicas que asocian la periodontitis con enfermedades cardiovasculares o, incluso, determinadas complicaciones del embarazo.
- Diabetes
Tener una buena salud bucodental y periodontal no solo ayuda a prevenir la aparición de diabetes, sino que también contribuye a evitar su progresión e, incluso, a impedir el desarrollo de complicaciones derivadas de esta enfermedad metabólica.
En los últimos años se está constatando que la asociación entre diabetes y enfermedades periodontales es bidireccional, es decir, que la diabetes aumenta el riesgo de sufrir enfermedades periodontales y que las enfermedades de las encías pueden afectar negativamente a la diabetes.
- Disfunción eréctil
Una inflamación continuada de las encías también nos puede alertar sobre la disfunción eréctil. La enfermedad crónica de las encías es consecuencia de un problema en el flujo sanguíneo general y esto puede ser una primera señal para diagnosticar una disfunción eréctil. Cuatro de cada cinco hombres con este problema en su vida sexual también presenta inflamación de las encías.
- Xerostomía
A nivel de la encía, esta característica se traduce en una mayor fragilidad de los epitelios frente a traumatismos. Para remediarlo, se puede recurrir a la toma de medicamentos o a la toma controlada de caramelos y chicles sin azúcar con sabor a fresa ácida o a limón.
- Enfermedades neurológicas
El déficit motor y cognitivo que sufren las personas con enfermedades de Parkinson puede inhabilitar al individuo para tener una correcta higiene diaria, ya sea por una incapacidad motora para manejar los utensilios necesarios para la misma o por el simple olvido.
Muchos de los fármacos utilizados para el tratamiento de la enfermedad pueden alterar el estado de salud oral al provocar xerostomía, lo que a su vez causa una mayor proliferación de placa bacteriana, pudiendo ocasionar caries, enfermedad periodontal e hiperplasia gingival.
- Complicaciones en la enfermedad renal
Las personas cuya enfermedad renal está mal controlada o descompensada pueden sufrir calcificaciones en tejidos blandos de la boca o en los huesos y articulaciones mandibulares. Otras afecciones que pueden surgir son las úlceras en la boca, la manifestación del exceso de urea y creatina, entre otros compuestos, que se traduce en mal aliento, zonas enrojecidas y dolorosas o sequedad de boca.
- Virus del Papiloma Humano
Las personas cuyos dientes y encías están en malas condiciones podrían ser más susceptibles a tener este virus oral que puede provocar ciertos cánceres de boca y garganta.