Clínica dental Oviedo
Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos compartir con vosotros un articulo sobre lo que es la halitosis.
La halitosis, también llamada mal aliento, alude al conjunto de olores desagradables que salen de la boca independientemente de cuál sea su origen.
La halitosis es casi siempre producto de una deficiente salud bucodental.
La gran mayoría de las causas que están detrás del mal aliento no hay que buscarlas en el estómago, sino en la boca: en un 90% de los casos de halitosis el origen procede de la boca y más de la mitad de ellos están estrechamente vinculados con enfermedades de las encías.
Se da una situación paradójica en la halitosis y es que hay muchas personas que tienen mal aliento que no son conscientes de su problema y hay otras que viven obsesionadas con una halitosis «imaginaria» que no puede ser confirmada.
Actualmente, se distinguen tres tipos principales de halitosis:
- H. genuina o verdadera: el mal olor está verdaderamente presente y se puede medir y objetivar. Se ha subdividido en otros tres grupos:
- Fisiológica: cuando el mal olor procede del dorso de la lengua.
- Oral: radica en la lengua y está ocasionado también por alguna de las enfermedades periodontales.
- Extraoral: asociada principalmente a problemas otorrinolaringológicos.
- Pseudohalitosis: cuando no existe mal olor bucal pero el paciente cree que sí.
- Halitofobia: después del tratamiento de la halitosis verdadera o de la paseudohalitosis, el paciente todavía cree de manera persistente que tiene mal aliento.
La denominada halitosis patológica de origen oral (90% de las halitosis) se caracteriza por la emisión de gases con un olor desagradable, perceptible por otros, a través de la cavidad bucal. Este olor desagradable es más intenso en los primeros momentos del día, tras levantarse, ya que las bacterias han tenido muchas horas para multiplicarse libremente tanto sobre la superficie de la lengua como en los demás tejidos duros y blandos de la cavidad bucal, y además el flujo salivar disminuye durante la noche. Algo similar ocurre tras varias horas de ayuno, durante situaciones de mucho estrés o tras hablar durante un tiempo prolongado.
El papel de los odontólogos, periodoncistas e higienistas es fundamental a la hora de informar y orientar a estos pacientes, disponiendo de cuestionarios de salud que pueden rellenar cuando acuden por primera vez a la clínica y que resultan muy orientativos.
Además, como recurso preventivo esencial se recomienda que la boca se mantenga en un buen estado de salud y, en especial, que las encías se encuentren sanas. Para ello, se aconseja el cumplimiento diario de medidas de higiene oral adecuadas que incluyan no sólo el cepillado dental, sino también limpieza interdental mediante seda dental o cepillos interdentales y, muy importante, que incluyan medidas de higiene lingual con raspadores linguales.
Una vez que el problema de la halitosis es detectado, su tratamiento tiene como objetivo disminuir el número de bacterias productoras de mal olor presentes principalmente en el dorso posterior de la lengua y en los surcos o bolsas periodontales, y neutralizar estos productos malolientes para que dejen de ser perceptibles.