Clínica dental Oviedo. Problemas sequedad bucal.
En más de una ocasión acuden a nuestra clínica dental en Oviedo personas con problemas de boca seca.
La sequedad bucal ocasional no tiene mayor importancia si se trata de episodios anecdóticos. Hablamos de sequedad ocasional cuando viene asociada a momentos en los que es preciso hablar durante mucho tiempo o como reacción a ciertas situaciones de estrés. Sin embargo, el síndrome de boca seca o xerostomía requiere una mayor atención y cuidado.
¿Qué es el síndrome de la boca seca?
La xerostomía puede reconocerse por una menor capacidad de secreción del flujo de saliva. Esta secreción puede verse reducida aproximadamente a la mitad, aunque la sensación de boca seca depende de cada paciente. Es subjetiva.
Entre los síntomas más habituales que refieren los pacientes en su visita al dentista encontramos además de esa propia sensación de sequedad o de boca pastosa, cierto ardor, halitosis, problemas en la deglución de alimentos e incluso la disgeusia o alteración en el sentido del gusto. Esto último puede ser muy desagradable. No se trata ya de una incapacidad de apreciar el sabor de los alimentos. Ocurre en estos casos que ese sabor se ve alterado, produciendo, por ejemplo, un característico sabor metálico en la ingesta de carnes, entre otros alimentos.
En ocasiones son los propios odontólogos o higienistas, al tratar a los pacientes en la clínica dental, los que detectan el síndrome de boca seca. Lo hacen a partir de signos como las alteraciones en la mucosa, falta de brillo en las encías o presencia de fisuras linguales, entre otros.
¿Por qué se produce la xerostomía?
Puede haber muchas causas entre las que podemos citar el uso de determinados medicamentos como ciertos antidepresivos o antipsicóticos. O algunos indicados para el tratamiento del Parkinson o los antihistamínicos.
También algunas enfermedades favorecen la aparición de este síndrome de boca seca. Como hemos constatado en ciertos pacientes de nuestra clínica dental de Oviedo. Es el caso de la diabetes o incluso los trastornos de ansiedad, la anorexia nerviosa o la depresión.
Los problemas asociados al síndrome de la boca seca son muchos. Problemas debidos fundamentalmente al déficit de salivación. Sin la protección que la saliva proporciona a la cavidad bucal pueden aparecer erosiones o candidiasis. Y una mayor incidencia de caries debido al desequilibrio en el PH. Eso sin contar la incomodidad que, en algunos pacientes produce incluso insomnio. De hecho, se dan despertares nocturnos provocados por la sequedad bucal.
¿Cómo combatir la sequedad de la boca?
Es fundamental insistir en mantener los niveles de humidificación de la boca, con una hidratación constante. Por eso es muy recomendable beber habitualmente agua aunque sea a pequeños sorbos. Especialmente durante las comidas, y evitando la ingesta de alimentos que favorezcan la sequedad bucal. Los chicles sin azúcar pueden favorecer la secreción salivar y servir de estímulo. También ciertos alimentos que exigen forzar la masticación, como la zanahoria, pueden ayudarnos a mantener esos niveles de saliva tan necesarios. Existen también posibilidades de tratamiento con ciertos fármacos así como el empleo de enjuagues bucales para combatir algunos efectos de la xerostomía, por lo que nuestra recomendación es que acudan siempre a la consulta de un profesional.
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